viernes, 31 de mayo de 2019




El cielo de las aves zancudas

El cielo de las aves zancudas es lejano.
Es un cielo que limita al norte con la estrella polar
tan pura en su esencia que el ave zancuda
tirita cuando la observa.
Ella roza el sur con alas de plumaje desastrado;
sus zancos patean el barro y las hojas
y es perfecta su carrera, y es precario su vuelo.
Somos aves zancudas,
somos Ícaro contemplando el cielo
como un abismo insondable.